SANCHO
PE
José
Luis Pérez Fuente
Escritor,
profesor y crítico literario
Dicen las malas
lenguas que Sancho Panza, tras el óbito de su amo, se sumió en una profunda
depresión con evidentes trastornos somáticos y múltiples disfunciones
orgánicas.
Encerrado en la sacristía de la iglesia
del pueblo de cuyo nombre no logro acordarme, se bebió dos cueros del dulce
néctar predestinado a la consagración eucarística y, en una fantástica pirueta
espacio-temporal, escapó de su maniqueísmo determinista malo-maldito y fue a
parar misteriosamente al Globe Theatre de la ciudad de
Londres, dando con sus huesos en una tragedia que allí se representaba. En el
acto se enamoró de la voluble protagonista, Desdémona, que andaba coqueteando
con mucho desdén en la anegada Venecia. Antes de finalizar la obra, Sancho –Mr.
Bacon para los británicos– hubo de salir por pies, haciendo mutis por el foro,
como lo hiciera en su momento de la efímera y fantástica ínsula, dado que el
celoso y proceloso marido, Otelo, malaconsejado por el malhadado Yago lo
buscaba para ajustar cuentas, apretarle los machos y el gaznate. Shakespeare no
quiso acogerlo como personaje de sus obras ya que el fiel escudero quijotesco
no había estudiado en un colegio bilingüe y su currículum carecía de los
créditos suficientes; más bien tenía muchos descréditos.
Doña Teresa Panza, enterada de los
devaneos de su despendolado consorte, quiso arruinarle su inmortal existencia
literaria contratando los ominosos servicios litigantes de un abogado
matrimonialista a la par que, una vez descubierto también su don de ubicuidad
temporal, decidió acudir a los paupérrimos programas televisivos de Tele-cínico para evidenciar el abandono
conyugal de su pareja y participar como jurado en concursos mediáticos, dada su
habilidad para quedarse con la boca abierta como grandílocua papamoscas.
Sancho, tras numerosos viajes
interiores –con la inestimable ayuda de los derivados del cáñamo y el
patrocinio de Lexatin 1.5– logró
salir a flote en un plató de cine donde se rodaban escenas de Torrente 6.
Inmediatamente fue contratado como doble del protagonista dado su parecido
físico-intelectual.
Las
últimas noticias apuntan a que Sancho Pe –ahora se hace llamar así– se ha
amancebado con la Princesa del pueblo (pueblo aborregado, como el cielo en
algunas ocasiones) y ambos amenazan con publicar sus sentimentales memorias.