Por Alexander Anchía Vindas
Profesor de la Universidad Autónoma de Centro América, escritor y crítico literario
¿Quién
es Luis Arias Manzo en el ámbito literario, qué ha hecho? Tales cosas empecé
preguntando al anfitrión en Chile del Proyecto Internacional de Poesía Gráfica.
Y fue muy interesante lo que me contó…
Luis
es un Melipillano que se inició en la escritura de modo sorpresivo, siempre
estuvo ansioso por ligarse a las letras desde muy joven, pero nunca tuvo la
oportunidad de estudiar Letras; al contrario, hubo de estudiar una carrera
técnica por razones amplias, ingresando en mundo de la Literatura cuando terminaba
el milenio pasado; entonces comenzó a escribir de manera profesional. Y ahí es
cuando surgen tres libros que conforman una trilogía sobre los asuntos pendientes
que quedan en la vida cuando se ha de emprender un itinerario azarosamente. Él
apunta que eso pasa porque surgen personas que llegaron a su vida y le hacen
escribir, concurriendo asimismo situaciones místicas que lo alejaron de sus
parámetros vitales, basados en el materialismo. Ahí surgieron situaciones que le
hicieron cambiar el concepto que de la existencia misma tenía. Se allegó, por así
decirlo, a una espiritualidad que chocaba
con lo que, filosóficamente hablando, había sido. Se produjo un conflicto entre
materialismo y espiritualidad en su interior.
La
idea de crear el movimiento internacional Poetas del Mundo le surgió
precisamente cuando vivió los momentos de cambio antes apuntados. Una de las
musas le hizo cambiar de vida a inicios de 2001, instándolo a cumplir una
misión. Tal musa llegó a su vida para otorgarle conciencia de algunas de las
cosas que había que cambiar en el mundo a través de la palabra. Así las cosas,
en el año 2005 inicia el proyecto Poetas del Mundo.
En
cuando a su participación en el Proyecto Internacional de Poesía Gráfica, tal
cosa le parece una excelente idea, proporcionándole orgullo el confraternizar con
los otros participantes, porque al dedicarse de manera tan intensa a Poetas del
Mundo había dejado un tanto aparcada su propia obra literaria. Y es que
considera de vital importancia luchar por unir a cuantos más poetas de cuantos
más países del mundo en pos de la defensa de la vida misma. No obstante, en tal
empeño, corría el riesgo de olvidarse de sí mismo, de su poesía, una
herramienta legítima por demás en cuanto que instrumento para defender el
proyecto humano.
LUIS ARIAS MANZO |